sábado, 27 de enero de 2007

Hablamos de conciencia?

"No nos relacionamos con la vida "misma" sino con nuestra comprensión de la vida". Tom Andersen
Ser consciente o inconsciente, es el dilema, al igual que "ser o no ser", esa es la cuestión.
Ser consciente de nuestras actitudes, dirigir la vida propia acorde con nuestros propósitos. Marcar un camino a seguir y no desviarse de la senda. Ser buenos, dóciles, actuar moralmente, cumplir las normas que han sido impuestas por los mismos humanos, aquellos doctores sabios y disciplinados que nunca cometen errores porque actuan conscientemente.
Sano propósito el actuar normalmente y, así, cuando apaciblemente llegue la noche y el sueño se apodere de todo tu ser puedas dejarte llevar mansamente y descansar con la conciencia tranquila.
Y qué ocurre cuando despiertas a medianoche aterrado por un mal sueño?
Te preguntas, por qué he tenido esta pesadilla?.
Hola, soy yo, el otro, el hermano gemelo de la consciencia. Ya me irás conociendo, tenemos un largo camino por recorrer. Me presento: soy el inconsciente.
Te sobresaltas, pegas un brinco y te dices:
El irresponsable, el loco. No puede ser, lo tenía controlado.
Amigo mío no te asustes, verás, la consciencia no tiene acceso a mí, yo aparezco cuendo ella está dormida, me revelo en sueños y te doy un toque para indicarte que no todo marcha bien.
Hay veces que aparezco en la fase intermedia disfrazado de subconsciente y, en ciertos casos soy efectivo puesto que me escuchais y algunos hasta se deciden y se atreven en dar un giro a su camino. Me siento orgulloso de mi misión.
Me causas problemas- advirtió la consciencia.
Si, lo sé, pero no olvides que soy el inseparable, escúchame, siempre buscaré tu bienestar.
Acepta el consejo que te doy:
Escúchate a tí mismo, disfruta llanamente de tus emociones, eso nos diferencia de los seres inanimados y no por eso puedes considerarte que actúas con mala consciencia.
Bien, esto no se si servirá para algo. Queda tanto por decir!
Solo es el principio y no se trata de dar una clase magistral, simplemente crear dudas en aquellos que piensen que : "Los sueños sueños son".

3 comentarios:

adriahna dijo...

Diálogos entre el inconsciente y el individuo. Hermoso recurso para plantear las múltiples ocasiones en que las personas nos enzaramos en una feroz lucha con nuestra mente, bien sea con nuestro más salvaje instinto o con la tan molesta conciencia.
José Saramago describía, en "El hombre duplicado", conversaciones entre el protagonista y su conciencia. Ésta le acusaba de actuar de manera incorrecta, incluso perjudicial para su persona. Máximo, que así se llama el sujeto en cuestión, rechazaba la reprimenda y hacía caso omiso a sus comentarios. El incosciente aquí salía vencedor de la batalla.
¿Qué es lo correcto? ¿Qué nos hace ser más felices y alcanzar nuestros sueños de la mejor manera posible?
La clave, creo, está en el equilibrio. A veces es necesario acallar esa vocecita que es tan cobarde que sólo se atreve a atacarte cuando, en tu momento de mayor indefensión, te crees protegido por los fuertes brazos de Morfeo.

Unknown dijo...

Toc Toc...Mister Hyde supongo...Aquí de nuevo?, welcome.
Bueno atrápale un pensamiento rápido y sácale el jugo aunque moleste y duela,¡desde todos los ángulos!, traslada al consciente los cuestionamientos, uf!, ahí hay cosas que no me gustan de mi, pero seguro que me ayuda, pero esto es otra!, vaya esfuerzo depurarlas!.
Esas pesadillas yo diría, "advertencias del miedo fundado e infundado" son bastantes más transparentes y previsoras del trabajo a realizar. Al fin y al cabo lo que hay es mucho labor de moral en toda ésta labor (casiná), pero y qué...si no, no seríamos humanos.

Santa dijo...

Solo sueñan los vivos. Y pocos se dan permiso para realizarlos, antes de morir.

Un saludo